Archive for marzo, 2016


Cuando me veo obligada a pronunciarme sobre la cuestión de las creencias espirituales, yo, la verdad, veo que mi falta de interés, sentimiento e intuición sobre el tema parece asociarme a una posición agnóstica. Realmente, no me interesa la cuestión, para mí el mundo espiritual es una no realidad, y es tal la no vinculación mía personal al tema que ni siquiera tengo interés en negar que exista un mundo espiritual; siempre y cuando no se imponga al resto a través de una religión o dogmas presentados como libertades.

Sobre la cuestión del sexo y el género me ocurre algo parecido. La diferencia está en que al vivir en un mundo patriarcal me veo obligada constantemente a luchar por espacio para vivir, pensar, sentir, intuir, relacionarme, pues el sistema de organización social que es el patriarcado no tolera que el mundo pueda operar desde lo que pienso, imagino, sospecho, intuyo, razono que es posible: un mundo donde las cuestiones biológicas sexuales no determine más que lo que pueda determinar tener manos, por ejemplo: algo directamente afectado por el tema, no toda la realidad de la persona y del mundo humano.

Yo no sé si soy una mujer en un sentido ontológico, sí sé que lo soy en un sentido social y a consecuencia de lo que la cultura impacta a las personas individualmente, que es mucho más que la biología. Sé que rechazo cosas que soy como Mujer en el patriarcado (pongamos, maneras femeninas patriarcales de hablar; que al tiempo conviven con maneras femeninas feministas y con atisbos quiero pensar de maneras humanas, de ser de la especie humana, simplemente). Sé que mi identidad y vida me demuestran que el tema del sexo y el género según se concibe en el patriarcado es relativo, y que ha fracasado como idea útil para organizar la vida humana, por toda la violencia que ha impuesto en las personas, y todas las limitaciones que ha impuesto respecto al desarrollo de su potencial, por no añadir ahora en su capacidad para la convivencia.

¿Y por qué lo sé? ¿Por qué, si ni siquiera sé si soy mujer, sé que el ser mujer según el patriarcado es una violencia contra la persona? Por el lenguaje, que es una muestra del potencial de nuestras mentes, nuestra capacidad mental para pensar, imaginar, intuir y relacionarnos con lo que está fuera de ellas. El lenguaje es un espejo de la maleabilidad de la mente humana. Es tan directamente nuestro individualmente y nuestro socialmente que en él pueden convivir todo tipo de realidades, las reconocidas como tales y las perseguidas o reprimidas. Y cuando hablo de lenguaje no hablo sólo de las palabras concretas sino de la capacidad de vivir o conocer y comunicar. El hecho de que en el lenguaje prevalezca el mundo patriarcal, con su reducción brutal de todo a dos cosas que se oponen y donde una de ellas debe prevalecer, lo que me llamo los binomios contendientes patriarcales, no elimina todos los otros mundos que el lenguaje nos ofrece, y de hecho a lo largo de la historia de la humanidad, si bien el patriarcado ha sido impuesto mayoritariamente en el planeta, por su extrema violencia o su sistema radical de violencias ejercidas, no ha podido eliminar la naturaleza humana, que tiene que ver con una visión mucho más diversa, compleja, libre de la cuestión de la identidad.

Para mí, una especie capaz de lo que es capaz el lenguaje y la comunicación humana no puede establecer un mundo de identidad tan primitivo y brutal como el que ha establecido el sistema patriarcal.

Si como feminista me paso el día hablando de hombres y mujeres, que es en realidad decir, hablando de el Hombre (con mayúscula) y lo que el Hombre ha definido que es el resto; si como feminista me paso el día reivindicando el derecho de ellas a ser nombradas, es a mi pesar, y porque no hay manera de empezar de cero, pues la vida es siempre un proceso, en lo que nos gusta, nos es indiferente, nos duele o destruye, en lo que nos hace bien, nos da felicidad, amor, consuelo, alegría y en todo lo demás hasta el extremo de desear la muerte. Es fácil comprobar que no existe el masculino genérico, que hasta el siglo veinte todo lo que nos ha llegado escrito estaba en masculino porque hablaba del Hombre y era escrito por el Hombre, y que en el siglo veinte se ha iniciado una r.evolución sin parangón, donde muchísimas personas con todo tipo de ideas han expresado realidades que nada tenían que ver con la supuesta realidad del sistema sexo-género patriarcal, que es la piedra fundacional de su cruel tipo de sociedad.

Cuando el ánimo decae, pues la historia de la identidad en el patriarcado es una pesadilla totalitaria, lo que yo pienso es que igual que el frío o el miedo extremo te impide pensar con libertad al sentirlos, o así ocurre también con la lucha por sobrevivir ante un problema mayúsculo de la naturaleza, como un tornado, por más que la ideología patriarcal haya constituido mi identidad, mi identidad es mucho más y está en mi mano ser, o luchar por ser más bien, siendo, porque andando se hace el camino.

“Si no me nombras, no existes” es una pequeña piedra de apoyo para avanzar cruzando el río. Y al tiempo, que yo defina mi identidad no implica que te excluya. Lo que está y aparece en el horizonte es mucho más, más complejo y profundo: es que consiga ver y saber yo y que le sea evidente a quien se tope conmigo que mi identidad es única y por tanto merece el mínimo respeto de la convivencia y el respeto del amor y el aprecio para quien sienta una sintonía.

La guerra de las escuelas es patriarcal. El amor al conocimiento no tiene relación con la guerra, sino con la vida. Cuando estuve en Londres, entre 1989 y 1992, en un 8 de marzo vi como una metáfora que no había visto antes: cómo cada grupo, o red, o persona hacía lo suyo, y cómo en esta celebración y conmemoración de la lucha feminista, siendo cada cual lo suyo, en ese universo de diversidad, se había generado algo: un movimiento. Tiene que ocurrir que se comprenda que todo el trabajo de investigación y pensamiento, así como toda creación y activismo, todo lo que cuestiona la ideología patriarcal forma un conjunto de vida que puede transformar lo que en el pasado prevalecía.

No hay que hacerlo todo, hay que hacer lo tuyo, y cuanta más gente haga lo suyo desde una mentalidad que aspira a superar las violencias e injusticias, desde ese afán de desarrollo de la inteligencia, que incluye la racionalidad empática (frente a la Razón patriarcal), se formará el todo que traerá esa evolución mejor.

Stephen John Darbishire

StephenJohnDarbishire

Paloma de los Ríos

palomadelosrios

Arquitecto Ricardo Velázquez Bosco

Madrid_Palacio_Cristal

http://www.soberaniaalimentaria.info/publicados/numero-17/72-tomates-con-marca-registrada

Mapa de transgénicos en España con municipios libres de transgénicos (Greenpeace)

(Los transgénicos generan productos sin semilla, por lo que se crea la dependencia alimentaria, la no libertad de sembrar una semilla además.)

Situación de los municipios

Aquí podemos observar que en 2014 en más de 400 municipios se cultivó maíz transgénico, pero también que ya más de 180 se han declarado libres de transgénicos.

Ejea de los Caballeros, provincia de Zaragoza, es el municipio donde más maíz transgénico se ha sembrado (2.229 hectáreas). Le sigue Don Benito (Badajoz) con 1.389 ha y Sariñena (Huesca) con 1.277 ha. La mayoría de los municipios con una gran superficie de transgénicos se encuentran en la provincia de Zaragoza y Huesca.

Existen muchas localidades con una superficie ínfima de maíz transgénico. Lo que facilita dejar de utilizar estas variedades, porque además en ningún caso se justifica su uso.

http://www.greenpeace.org/espana/es/Trabajamos-en/Transgenicos/mapa-de-espana/

Marzo 2016: La RAE, academia de la lengua que no existe ya, no puede hacer nada contra el cambio lingüístico, y han sacado una traducción del Quijote al español del siglo 21 porque aunque hablamos la misma lengua siglos después, ésta ha cambiado tanto como es lógico, con el paso del tiempo, con la evolución de las sociedades, que ya no hay quien se lea el Quijote en el español en que fue escrito. Salvado Cervantes, para disfrute de generaciones muy posteriores, la RAE, acorralada en su esquina de anacrónico querer imponer la lengua que conciben como correcta porque no entienden la lingüística moderna a la población hablante (¡no sólo de su país, claro, porque son hijos del imperio!), arremeten con el tema que más les crispa: el absurdo (según ellos) de nombrar a las mujeres pues (para ellos; supongo que las mujeres de la RAE no se sentirán molestas con este uso del masculino «inclusivo») nombrando al Hombre, como siempre, basta.

Omiten los datos de la realidad, claro: la exclusión de las mujeres del derecho a ser nombradas tiene relación con su exclusión de siglos, impuesta en las sociedades patriarcales, del ámbito del conocimiento, la creación, de todo lo que no sea ajustarse al papel de madre procreadora patriarcal, sirvienta, educadora patriarcal, muñeca de goma o santa; y sobre todo: que ya lo sabemos, y que ya ha empezado a cambiar. Quien entiende la importancia de tener un nombre propio, entiende la importancia de su derecho a recibir ese mínimo respeto. Ya no nombramos sólo a las damas, esposas de los hombres poderosos; ahora todas las mujeres tienen ese derecho: que si te diriges a ellas, si quieres llamar su atención, si quieres que te escuchen, si quieres pedir su apoyo, su ayuda, tienes que nombrarlas, porque la lengua española tiene (además de innumerables excepciones, como todas las lenguas humanas) un recurso gramatical conectado al género («masculino/femenino»; en español no hay sustantivos neutros): que en general el sufijo “o” indica género masculino y el sufijo “a” genéro femenino.

Y hasta que logremos construir sociedades donde esa visión tan limitada del sexo humano se supere, habrá que ir ampliando para visualizar quiénes existimos: no sólo el Hombre patriarcal, ordenando y mandando durante siglos que las mujeres deben ser dominadas por Él porque no tienen rasgos nobles ni inteligencia suficiente, además de ser más débiles físicamente, esas grandes mentiras de la Historia patriarcal sobre media humanidad. Una media humana oprimida que durante siglos ha demostrado, no obstante, tener nobleza, inteligencia, fortalezas de muchos tipos, porque eso son rasgos humanos y los puede tener cualquier persona al margen de sus genitales.

El sistema sexo-género patriarcal se basa en ideas muy primitivas y violentas sobre lo que somos las personas: los hombres no son todos como el Sistema describe, las mujeres tampoco, y también sabemos que hay más tipos de personas, que hombres y mujeres, que las personas, comparten muchos rasgos, todo el potencial, porque son de la misma especie, la humana. La maleabilidad del cerebro y la mente humanas es tan asombrosa que sencillamente cómo sea nuestra mente tendrá que ver (más que nada dada la gran importancia que le concedemos a las relaciones con otras personas) con la capacidad de aprender y, al margen de nuestros talentos individuales «innatos», lo que constituya nuestra mente viva: el desarrollo (esa oportunidad) de cómo usamos nuestra inteligencia, que viene marcado por lo que el resto espera que seamos, ese poderoso condicionante, y por eso tenemos que dejar de querer que seamos según una norma, la de género patriarcal, que nos limita el desarrollo de la inteligencia, condenándonos al barbarismo.

Es cobarde, además de todo lo expuesto, rabiar por un tema X y arremeter contra un tema Y, pongamos, el clásico «universal» del patriarcado: la estupidez, maldad, ridiculez, histeria de las mujeres, porque hay siglos de condicionamiento para que ellas siempre nos parezcan las peligrosas y violentas, las idiotas.

La RAE debería dedicarse a la elaboración, si acaso, de diccionarios etimológicos, y dejar de intentar impedir la evolución que ya se ha producido, explicándonos que es ridículo, inadecuado, erróneo lo que decimos, que hagamos lo que estamos haciendo: nombrar en femenino a las mujeres cuando están ahí y las vemos como antes no las hemos visto: como protagonistas de su vida también. La antesala, efectivamente (¿acaso da miedo?), de que tras nombrarlas a ellas lleguemos a la noción de que en literatura, por ejemplo, personas que son mujeres puedan ser vistas como creadoras de una obra que toca lo humano, la esencia humana, en lugar de ser llamadas creadoras de la confesión de su pequeña, ridícula y desagradable existencia. (Cómo si la literatura de Proust fuera menos «confesional» que la de Sylvia Plath; y no entenderán el problema que plantean porque su ideología les impide pensar con amplitud de miras.)

Vamos de camino a un mundo inclusivo de las personas, lo que implica la superación de un tipo de sociedad que ha machacado la identidad de millones de personas limitando su desarrollo y vidas a unos papeles de género, dos, que si bien tienen algo que ver con la realidad, ya queda claro que son más destructivos que útiles o buenos. El amor, la solidaridad, la inteligencia, el valor, la nobleza, la fortaleza, todos los rasgos positivos humanos tienen un potencial de desarrollo diferente y mucho más amplio. Bastará con que dejemos de invertir tanta energía y recursos en desarrollar lo peor de lo que somos capaces y que le prestemos atención a todo lo asombroso de lo que somos capaces, superando el machismo, la misoginia, la homofobia y transfobia, el racismo, el clasismo… esos conceptos que sólo han servido para construir un mundo de renuncia al uso de la inteligencia a favor del uso de la violencia, partiendo de la violencia primera que es ordenar a una persona cómo debe construir su identidad, negando así su potencial, su identidad posible.

En nuestra recuperación de la Historia desde la investigación ya estamos viendo que a pesar de todo el Sistema de violencia, las mujeres, por ejemplo, han existido no sólo como mujeres patriarcales que encajaban con lo que el Sistema esperaba de ellas, sino como personas, por lo que siempre han estado ahí, luchando, eso sí, contra un Goliat, y existiendo, es decir: no se ha podido hacer de las mujeres lo que el Sistema pretendía, a pesar de todas las violencias ejercidas. Porque somos humanas, somos personas, no ese papel que se tradicionalmente se nos ha asignado.

Si no me nombras, eres tú quien no existe. Yo existo y tengo un nombre. No habremos pasado a la historia pero siempre hemos estado aquí y ahora no vamos a renunciar a ser nombradas.

RAEMUERTA

Sé que hay que aprender a decir “no” porque la gente no está en tu piel y pide a quien da, sin preguntar, sin pensar.

Pero algo en mí se subleva con furiosidad ante el hecho de que se atribuya a quien da el supuesto error de no saber decir “no”. Algo que respondería, “¿y la empatía hacia quien da?”

Bien, hay que ser autosuficiente, independiente. Pero me resuena en la mente:

La cuestión es, ¿la tara de la inteligencia humana es así de no tener posibilidad real de superarse, para construir personas con inteligencia empática?

Esto es ser masa prevalente

Si encuentras cosas mediocres,
malas, corruptas, no notas nada.
Como decía Ferlosio,
“Tolerante, piel de elefante”.
Si encuentras algo bueno o bello,
en el mejor de los casos
te preguntas si debería estar ahí,
en el peor, ejerces, impulsada por la indignación,
toda la legítima violencia.

Patriarcado a juicio por crímenes contra la humanidad.

Divergente

 

Miro una película de ciencia ficción

y pienso, ¿Por qué se identifica la gente

con la protagonista?

Su divergencia es verse víctima y no

comprender la violencia de una realidad

y combatirla, aunque estés sola.

Y hablando de personas vivas, quería dedicarle este poema a Patricia Toledo

En América, una líder indígena
con una sonrisa de tierra bajo el sol
cálida y tranquila
y una fuerza que sólo puede tenerse
cuando amas
es asesinada en su cama
porque el Hombre no va a tolerar
que luchemos por protegernos,
por proteger la vida en el planeta.

En Europa, en pantallas, ese voraz depredador,
seguido y encubierto por un regimiento de buena gente
con ansias de migajas o fortunas instantáneas
o siquiera ganas de linchar, aúna esfuerzos
y acorralan y empujan al túnel del pozo
a una artista del soul.
No es violencia, era una drogadicta.

Sus muertes nos multiplican,
nos hacen más fuertes, nos ayudan
a no distraernos, ni perdernos.

No somos temibles, pero es comprensible
que nos tengan miedo porque no hay fuerza a su alcance
que pueda eliminarnos, ni con siglos de violencia.

Berta Caceres stands at the COPINH (the Council of Popular and Indigenous Organizations of Honduras) offices in La Esperanza, Intibucá, Honduras where she, COPINH have organized a two year campaign to halt construction on the Agua Zarca Hydroelectric project, that poses grave threats to Rio Blanco regional environment, river and indigenous Lenca people.

Berta Caceres, asesinada en su cama de un tiro el 3 de marzo del 2016, una de las fundadoras del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras, en La Esperanza, Intibucá. Organizó campañas, acciones para detener la construcción del proyecto hidroeléctricos que son una grave amenaza al medio ambiente, con río incluido, y al pueblo Lenca.

Me entero por Patricia Toledo, otra admirable persona.

Life teaches you how to live it but you need to live long enough
Tony Bennett, would have told Amy Winehouse