A JM

En la acelerada confusión del mundo humano

me topé con el claro de tus ojos, lago de luz bella

en el corazón del huracán y el tiempo.

Conozco las estaciones de nuestros viajes, o más bien,

las llevo dentro, alimentando mi sangre,

el impulso vital de mis ramificaciones trepadoras.

Conozco tus músculos de castaño centenario y florecido.

Cada despertar, el asombro y la alegría

de sentir tu vapor de sueño,

tu respiración, música de la vida

en el universo; tu cuerpo tibio y este amor

espejo y memoria, pura inteligencia,

como un campo silvestre en la guerra.

Poemas de mucho amor

michelle renyé

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