Una entrevista...
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ABC 18 mayo 2004
KATARINA TOMASEVSKI/ Relatora Especial de la ONU para el Derecho a la Educación: «Los niños españoles carecen de educación en derechos humanos»

Reconoce que se han realizado avances, pero lamenta que hoy día todavía no existan garantías para una educación gratuita en todos los países del mundo y lamenta la falta de condena de las violaciones al derecho a la educación, a los derechos de los maestros y a los derechos de la niñez MADRID. Durante seis años ha recorrido gran parte del mundo para velar por el derecho a la educación de millones de niños. Una educación que, a pesar de los esfuerzos, se enfrenta cada día a una «dramática» situación.-¿Cuál es, a su modo de ver, el «farolillo rojo» de la educación española?-Los escolares españoles carecen de educación en derechos humanos. España es el único país europeo que no tiene una asignatura que explique a los niños y jóvenes a qué nos referimos cuando hablamos de derechos humanos: a la educación, de la mujer, de acabar con el racismo, la violencia... Se pone interés en que sepan matemáticas o lengua, se insiste en un mayor número de horas para ello, pero nadie les explica qué y por qué están ocurriendo las cosas en el mundo. Los alumnos tienen que saber que tienen derechos y qué hacer con ellos, pero también que tienen deberes.-Una educación así resulta clave para entender fenómenos como el de la inmigración. ¿Cree que se está resolviendo bien en las escuelas?-No, no se está resolviendo bien. En todos los países europeos existe marginación hacia los inmigrantes y altos niveles de racismo y xenofobia. Y eso se reproduce en la escuela.-¿Por dónde habría que empezar?-Por enseñar a los niños y a la juventud cuáles son las causas de la inmigración. Por ello es necesario educar en derechos humanos, porque todo el mundo habla de lo que ocurre: pobreza, violencia, inmigración. Pero nadie explica por qué ocurre, cuáles son las causas, políticas o sociales, para que esos problemas se perpetúen en el tiempo.-¿Hablamos de crear una asignatura llamada «Derechos Humanos»?-Se puede llamar así, Educación y Sociedad... como quieran. No importa el nombre. Lo importante es establecer vínculos entre la educación y otros derechos humanos.-Su llamada de atención coincide con la demanda de muchos profesores y padres que reclaman una educación en valores...-Hay que puntualizar que es muy díficil educar en valores porque para ello se necesita un nivel altísimo de tolerancia. Hay asuntos que crean conflicto y en los que nadie tiene el derecho a decir qué valores resultan erróneos. Por ejemplo, el escolar puede haber recibido una educación religiosa en su casa y en la escuela encontrarse con una laica o viceversa, pero ningún docente puede poner en entredicho esos valores.-¿Alguna otra deficiencia?-Yo veo un problema gravísimo en el sistema español porque en el resto de Europa no resulta suficiente una educación general hasta los 14 ó 16 años. En los países europeos del norte ésta se extiende hasta los 18 años.-¿Qué opina de establecer itinerarios formativos a los 14 años?-Es demasiado pronto, se debe ofrecer una educación mucho más amplia, a esa edad no se puede encaminar a muchos estudiantes para el mercado laboral. Sobre todo en España, donde la tasa de desempleo juvenil supera a la del resto de países en más de un 10 por ciento. No tiene sentido preparar a los escolares para un mercado laboral en donde no existe empleo para ellos.-¿Educación pública o privada?-Hoy en día la educación pública ha perdido mucho de su prestigio. Los recortes presupuestarios hacia el sector público en todos los países del mundo han provocado que los padres que tienen dinero envíen a sus hijos a colegios privados. Es bueno que el Gobierno financie la educación y que permita otras alternativas, pero la educación pública está perdiendo su voz política porque los padres prefieren llevar a su hijos a la escuela privada.-Ha denunciado que desde los libros de texto se fomenta en muchas ocasiones la segregación...-Sí. Los textos escolares ofrecen con frecuencia visiones parciales de la historia y enseñan al niño a ver al otro como enemigo.-¿Esto genera violencia?-La segregación en la escuela de alumnos de distinto origen étnico y cultural es un factor que potencia la violencia. Como ejemplo, en las escuelas afganas se enseña matemáticas utilizando como unidades a enemigos comunistas a los que eliminar. Todos estos problemas evidencian la necesidad de un compromiso serio con el derecho a la educación en todos los países del mundo.«El asalto a la educación»La educación se ha convertido en un servicio que se compra y se vende, un negocio con el que la niñez pobre no tiene acceso a la educación. Una circunstancia que lleva a muchos niños a recurrir a la esclavitud o a la prostitución para poder pagarse la escuela, su salud o la vivienda. Así de claro lo refleja Tomasevski en su libro «El asalto a la Educación» que ha sido publicado en nuestro país por la ONG Intermón-Oxfam y en donde también llama la atención sobre las crecientes violaciones de los derechos humanos que sufren los profesionales de la docencia para lo que pide «una movilización firme» de toda la sociedad.